El municipio de Tekit, Yucatán, fue escenario de un desgarrador crimen cuando Doña Candy, una vecina muy apreciada por la comunidad, fue brutalmente asesinada en su propio domicilio. Tras la captura del presunto responsable por parte de las autoridades, los habitantes, conmocionados por la tragedia, lo interceptaron y decidieron tomar justicia por mano propia, golpeándolo severamente antes de que pudiera ser resguardado.
Dulce María, hija de la víctima, exigió justicia pronta y efectiva, al tiempo que lamentó el dolor que este crimen ha dejado en su familia y la comunidad. En respuesta, el gobernador Huacho Díaz Mena expresó sus condolencias y prometió reforzar la seguridad en la región, pidiendo a los ciudadanos mantener la calma y confiar en las instituciones para evitar que actos de violencia como este se repitan.












