El famoso restaurante flotante que fue arrastrado por las fuertes lluvias en días pasados desde Poza Rica, recorrió cientos de kilómetros hasta encontrar su destino encallado en el puerto de Coatzacoalcos, Veracruz. La estructura, que se volvió viral en redes, fue incluso avistada por pescadores mientras flotaba mar adentro sin control alguno.
Autoridades y curiosos no daban crédito al insólito viaje del restaurante, que cruzó ríos, corrientes y terminó su recorrido en altamar antes de ser llevado por la marea al sur del estado.
Usuarios en redes sociales reaccionaron con humor al suceso, asegurando que el restaurante “recorrió más territorio que la propia gobernadora”. El hecho ha sido catalogado como uno de los más curiosos tras las intensas lluvias que azotaron a Veracruz.











