En Yucatán se realizó por primera vez una cirugía cerebral pediátrica con el paciente despierto, un procedimiento poco común en adolescentes y que marca un avance significativo para la neurocirugía en México. La operación tuvo como objetivo extirpar un tumor de cinco centímetros ubicado en una zona delicada del cerebro.
El paciente, Francisco Javier, un joven de 16 años, permaneció consciente durante las seis horas que duró la intervención. Su participación activa permitió a los especialistas evaluar en tiempo real sus funciones motoras y del lenguaje, reduciendo el riesgo de afectar áreas esenciales.
Gracias a esta técnica, el equipo médico logró retirar el tumor con alto nivel de precisión, lo que disminuye la probabilidad de secuelas neurológicas. La interacción constante con el paciente permitió identificar los límites seguros para operar y evitar daños irreversibles.
El procedimiento se considera un hito para la neurocirugía pediátrica en el país, al demostrar que estas técnicas avanzadas pueden aplicarse con éxito en población joven. También abre la puerta a que más centros especializados adopten este tipo de intervenciones en casos complejos.
